El tratamiento con ventosas es un sistema de medicina tradicional oriental, con referencias con más de 2000 años de antigüedad, obteniendo mayor popularidad en los últimos tiemposcon su utilización por deportistas en los Juegos Olímpicos de 2016.
La terapia con ventosas se encuentra dentro de la medicina complementaria y alternativa.
Las aplicaciones de las ventosas son ejecutadas por profesionales cualificados.
Esta técnica consiste en la aplicación de presión negativa en un área específica de la piel generando un efecto vacío. Se utilizan copas con una forma circular de materiales como vidrio, metal o plástico, siendo este último el más utilizado, con un diámetro entre 25 y 75 milímetros habitualmente. El vacío se suele mantener comúnmente durante 5-10 minutos como mínimo, generando posteriormente en las zonas de actuación eritema, edema y/o equimosis.
Algunos de sus beneficios son:
Disminución del dolor producido por contracturas musculares.
Aumento del umbral de dolor en el área de aplicación y sus proximidades.
Aumento del flujo sanguíneo y linfático.
Liberación del tejido miofascial.
Mejora de la oxigenación de los tejidos.
Indicaciones:
Contracturas musculares.
Lumbalgia.
Cervicalgia.
Tendinitis como la del tendón de Aquiles o del codo.
Cicatrices con adherencias.
Contraindicaciones:
Cualquier patología de la piel en la zona a tratar, como heridas o infecciones.
